Drop formulas; How to worship purely
Suelta las fórmulas; cómo alabar a Dios de manera pura
Hola a todos,
Algunos pensamientos finales sobre los verdaderos asuntos con aquellos que buscan respuestas con CdC y otras enseñanzas basadas en fórmulas.
Caín es el padre de las falsas religiones: utilizando fórmulas para tratar de llegar a Dios
En Génesis 4: 1-15 tenemos la historia de Caín y Abel. Abel ofreció un sacrificio de sangre al Señor, pero Caín ofreció vegetales. El Señor Dios (Jehová Elohim o Cristo) que había soplado en el cuerpo de barro esculpido de Adán para darle vida, también mató a los primeros animales para el sacrificio de sangre. Yahvé Dios hizo para el hombre y su mujer túnicas de piel y los vistió. Génesis 3: 21
A Caín y Abel se les enseñó esto, por supuesto. Caín, sin embargo, rechazó la salvación y vino a Dios en sus propios términos, ofreciendo algunos de los vegetales que había trabajado duro para cultivar. El Señor, por supuesto, aceptó la ofrenda de Abel, pero no la de Caín.
Nadie puede acercarse a Dios por sus propias obras.
He compartido antes cómo en el Antiguo Testamento cuando una persona estaba en la presencia de Dios tenía que quitarse los zapatos, ya que eran hechos por un hombre.
Cuando construían un altar no podían alterar o trabajar las piedras de ninguna manera, sino que tenían que usarlas como se encontraban en el campo. Éxodo 3:5/Jueces 5: 15; Éxodo 20: 25/Dt 27:5
Abel aceptó la gracia de Dios, Caín no. Caín trató de llegar a Dios por sus propias obras, por su propia fórmula.
Por lo tanto, Caín se convirtió en el tipo de todas las religiones falsas a lo largo de todos los tiempos, ya que también tratan de acercarse a Dios a través de sus propias obras, basándose en falsas enseñanzas.
Un cristiano que ha nacido de nuevo puede preguntarse acerca de aquellos que suben escalones de rodillas.
O hacen santuarios, repiten las mismas oraciones una y otra vez, peregrinan a lugares santos o se lavan en ríos sagrados, pero hay muchas enseñanzas cristianas que hacen lo mismo: intentar llegar a Dios con sus propias fórmulas.
Las fórmulas cristianas que buscan manipular o impresionar a Dios caen bajo la categoría de Caín.
¿Cuántos de nosotros hemos ayunado para conmover a Dios? (Yo he sido culpable de eso al principio de mi caminar) ¿Cuántos han ido a ese servicio de la iglesia con motivos ulteriores como mostrarle a Dios cuan serio uno es, para recordarle de una cuenta que necesita ser pagada esta semana o alguna otra razón distinta que solamente ir a adorarlo? ¿Cuántos han repetido declaraciones de fe como un católico romano que reza siete Ave Marías?
¿Cuántos han dado dinero para conseguir dinero? ¿Cuántos han dado dinero para ser curados? ¿Cuántos han ido a seminarios buscando esa llave espiritual que lo abrirá todo y hará que viva en paz? ¿Cuántos han rezado para pedirle a Dios que se les aparezca?
Pablo ofreció respuestas generales a preguntas concretas
Cuando nos preguntamos si somos culpables de intentar acercarnos al Padre con sacrificios que hemos hecho, o fórmulas que hemos seguido, debemos mirar a nuestro propio corazón. Es allí donde reconoceremos nuestros motivos.
El primer año en que Barb y yo estuvimos casados, trabajé para un gran ministerio de televisión con sede en Charlotte, Carolina del Norte. Mi paga semanal era de unos 111 dólares después de impuestos. Una enseñanza popular en ese tiempo era de '100 veces el retorno'. En terminos prácticos significaba que si le dabas $10 al Senor podías esperar que Dios te diera 100 veces eso, o $1000.
Muy brevemente hicimos eso. Oramos sobre nuestro diezmo de $11, pidiendo al Padre y proclamando, declarando, confesando, un retorno de 100 veces. Inmediatamente Barb y yo nos sentimos afligidos en nuestros espíritus pero no entendíamos por qué razón.
Ella rápidamente lo precisó:
"Solíamos dar porque amamos al Señor y Su obra, pero cambiamos nuestro corazón a dar para recibir, y por eso el Espíritu Santo se entristeció". Nos arrepentimos y volvimos a dar por amor, aprecio, para satisfacer una necesidad -dándonos primero al Señor sin otro motivo que el amor.
El reino del corazón es del Señor, así que sólo alguien que pueda entender esto sabrá si hizo algo para el Señor por cualquier otro motivo que no sea el amor.
En Juan 4: 23-24 Jesús dijo:
"La hora viene y ya estamos en ella, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren. Dios (Padre) es Espíritu, y los que le adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad".
La palabra 'adorar' es 'proskuneo'. La palabra 'pros' significa 'hacia', y 'kuneo' es 'besar'. La adoración es, pues, literalmente, un beso al Padre. En aquel tiempo un beso era señal de alianza, como debería serlo hoy.
Hoy en día vemos a los amigos saludarse con un beso en la mejilla. Los esposos se besan en los labios. En su forma más pura, un beso es la afirmación de un pacto entre los dos. Dice que no se traicionarán ni se harán daño, sino que defenderán su relación.
Por eso la traición de Judas con un beso...
...está tan prominentemente documentada en Mateo 26: 48-49, Marcos 14: 44-45, y Lucas 22: 48.
La adoración es un beso al Padre, pero con condiciones: Los que adoran (besándolo a Él, en pacto con Él) deben hacerlo en espíritu y verdad.
El espíritu se refiere a tu corazón, no desde tu cabeza, sino desde lo más íntimo de tu ser, y la verdad se refiere a los motivos. Sin segundas intenciones, sin agendas ocultas.
Simplemente expresa al Padre tu amor puro sin peticiones, dale tu afecto, devoción, amor - Jesús dijo que el Padre busca a aquellos que son así para que le adoren.
Abandona todas las fórmulas, camina con el Padre y conócelo, y derrama tu amor hacia Él con pureza.
Tendremos un nuevo tema la semana que viene,
Hasta entonces, bendiciones,
John Fenn
http://www.cwowi.org
Y envíame un correo electrónico a
[email protected]
Suelta las fórmulas; cómo alabar a Dios de manera pura
Hola a todos,
Algunos pensamientos finales sobre los verdaderos asuntos con aquellos que buscan respuestas con CdC y otras enseñanzas basadas en fórmulas.
Caín es el padre de las falsas religiones: utilizando fórmulas para tratar de llegar a Dios
En Génesis 4: 1-15 tenemos la historia de Caín y Abel. Abel ofreció un sacrificio de sangre al Señor, pero Caín ofreció vegetales. El Señor Dios (Jehová Elohim o Cristo) que había soplado en el cuerpo de barro esculpido de Adán para darle vida, también mató a los primeros animales para el sacrificio de sangre. Yahvé Dios hizo para el hombre y su mujer túnicas de piel y los vistió. Génesis 3: 21
A Caín y Abel se les enseñó esto, por supuesto. Caín, sin embargo, rechazó la salvación y vino a Dios en sus propios términos, ofreciendo algunos de los vegetales que había trabajado duro para cultivar. El Señor, por supuesto, aceptó la ofrenda de Abel, pero no la de Caín.
Nadie puede acercarse a Dios por sus propias obras.
He compartido antes cómo en el Antiguo Testamento cuando una persona estaba en la presencia de Dios tenía que quitarse los zapatos, ya que eran hechos por un hombre.
Cuando construían un altar no podían alterar o trabajar las piedras de ninguna manera, sino que tenían que usarlas como se encontraban en el campo. Éxodo 3:5/Jueces 5: 15; Éxodo 20: 25/Dt 27:5
Abel aceptó la gracia de Dios, Caín no. Caín trató de llegar a Dios por sus propias obras, por su propia fórmula.
Por lo tanto, Caín se convirtió en el tipo de todas las religiones falsas a lo largo de todos los tiempos, ya que también tratan de acercarse a Dios a través de sus propias obras, basándose en falsas enseñanzas.
Un cristiano que ha nacido de nuevo puede preguntarse acerca de aquellos que suben escalones de rodillas.
O hacen santuarios, repiten las mismas oraciones una y otra vez, peregrinan a lugares santos o se lavan en ríos sagrados, pero hay muchas enseñanzas cristianas que hacen lo mismo: intentar llegar a Dios con sus propias fórmulas.
Las fórmulas cristianas que buscan manipular o impresionar a Dios caen bajo la categoría de Caín.
¿Cuántos de nosotros hemos ayunado para conmover a Dios? (Yo he sido culpable de eso al principio de mi caminar) ¿Cuántos han ido a ese servicio de la iglesia con motivos ulteriores como mostrarle a Dios cuan serio uno es, para recordarle de una cuenta que necesita ser pagada esta semana o alguna otra razón distinta que solamente ir a adorarlo? ¿Cuántos han repetido declaraciones de fe como un católico romano que reza siete Ave Marías?
¿Cuántos han dado dinero para conseguir dinero? ¿Cuántos han dado dinero para ser curados? ¿Cuántos han ido a seminarios buscando esa llave espiritual que lo abrirá todo y hará que viva en paz? ¿Cuántos han rezado para pedirle a Dios que se les aparezca?
Pablo ofreció respuestas generales a preguntas concretas
Cuando nos preguntamos si somos culpables de intentar acercarnos al Padre con sacrificios que hemos hecho, o fórmulas que hemos seguido, debemos mirar a nuestro propio corazón. Es allí donde reconoceremos nuestros motivos.
El primer año en que Barb y yo estuvimos casados, trabajé para un gran ministerio de televisión con sede en Charlotte, Carolina del Norte. Mi paga semanal era de unos 111 dólares después de impuestos. Una enseñanza popular en ese tiempo era de '100 veces el retorno'. En terminos prácticos significaba que si le dabas $10 al Senor podías esperar que Dios te diera 100 veces eso, o $1000.
Muy brevemente hicimos eso. Oramos sobre nuestro diezmo de $11, pidiendo al Padre y proclamando, declarando, confesando, un retorno de 100 veces. Inmediatamente Barb y yo nos sentimos afligidos en nuestros espíritus pero no entendíamos por qué razón.
Ella rápidamente lo precisó:
"Solíamos dar porque amamos al Señor y Su obra, pero cambiamos nuestro corazón a dar para recibir, y por eso el Espíritu Santo se entristeció". Nos arrepentimos y volvimos a dar por amor, aprecio, para satisfacer una necesidad -dándonos primero al Señor sin otro motivo que el amor.
El reino del corazón es del Señor, así que sólo alguien que pueda entender esto sabrá si hizo algo para el Señor por cualquier otro motivo que no sea el amor.
En Juan 4: 23-24 Jesús dijo:
"La hora viene y ya estamos en ella, en que los verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en verdad, porque así quiere el Padre que sean los que le adoren. Dios (Padre) es Espíritu, y los que le adoran deben hacerlo en espíritu y en verdad".
La palabra 'adorar' es 'proskuneo'. La palabra 'pros' significa 'hacia', y 'kuneo' es 'besar'. La adoración es, pues, literalmente, un beso al Padre. En aquel tiempo un beso era señal de alianza, como debería serlo hoy.
Hoy en día vemos a los amigos saludarse con un beso en la mejilla. Los esposos se besan en los labios. En su forma más pura, un beso es la afirmación de un pacto entre los dos. Dice que no se traicionarán ni se harán daño, sino que defenderán su relación.
Por eso la traición de Judas con un beso...
...está tan prominentemente documentada en Mateo 26: 48-49, Marcos 14: 44-45, y Lucas 22: 48.
La adoración es un beso al Padre, pero con condiciones: Los que adoran (besándolo a Él, en pacto con Él) deben hacerlo en espíritu y verdad.
El espíritu se refiere a tu corazón, no desde tu cabeza, sino desde lo más íntimo de tu ser, y la verdad se refiere a los motivos. Sin segundas intenciones, sin agendas ocultas.
Simplemente expresa al Padre tu amor puro sin peticiones, dale tu afecto, devoción, amor - Jesús dijo que el Padre busca a aquellos que son así para que le adoren.
Abandona todas las fórmulas, camina con el Padre y conócelo, y derrama tu amor hacia Él con pureza.
Tendremos un nuevo tema la semana que viene,
Hasta entonces, bendiciones,
John Fenn
http://www.cwowi.org
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