How Jesus heals emotions #3
Como Jesús sana las emociones #3
Hola a todos,
En las dos primeras partes de esta serie, he señalado que Jesús primero y siempre reconoce dónde está una persona en ese momento, sin opinión ni juicio.
Con la mujer en el pozo, era muy claro:
“Es cierto que has tenido cinco, y el que ahora tienes no es tu esposo. En esto has dicho la verdad" (Juan 4:18 NTI).
Veremos este patrón una y otra vez en los evangelios como Jesús sana las emociones, el primer paso; reconozca dónde está ahora.
Tal vez no tan irónicamente, esto es también fundamental en cada programa no espiritual que ayuda con problemas emocionales, desde las adicciones hasta la depresión, desde la ruina financiera hasta las relaciones quebrantadas que las personas han traído sobre sí mismas. Todos estos programas y métodos no espirituales, sin darse cuenta, han estado siguiendo el camino en el que el Señor comienza el proceso de sanidad de las emociones: reconozca donde está ahora.
En palabras modernas diríamos 'responsabilícese' de su vida. Admita en donde está (en qué estado está) ahora, - sin ningún juicio - sólo reconózcalo. Esto es muy diferente al evangelio erróneo que exige poco para que todos se sientan bien, que no confronta el pecado, ni pide una decisión difícil ni firme que está presentado por las iglesias carismáticas que antes fueron de vanguardia (hasta las iglesias Word of Faith). Una gran parte del evangelio social es sólo invítele a Jesús en su vida y Él hará todo mejor. Pero los métodos de Jesús son muy claros: el primer paso es admitir dónde se encuentra. Sea responsable.
Segundo paso....
Permita que el Señor reajuste sus ideas acerca de su propia historia. Esta mujer había pasado por 5 matrimonios que produjeron un montón de recuerdos y emociones que formaron su opinión sobre sí misma y su vida. Cuando Jesús “me ha dicho todo lo que he hecho“, reajustó su comprensión de su propia historia. Tenía que tener en cuenta que Jesús estaba presente en todo y sabía de su pasado. Ella aún tenía que dejarse a sí misma a tener tales preguntas como, "Si tú sabías todo esto, y veías todo esto, y me miraste pasar por todo esto, ¿por qué no interviniste? ¿Dónde estabas"?
Segundo paso, parte A
Si tuvo preguntas así, Jesús no le ofreció ninguna explicación. Una persona que está emocionalmente herida debe llegar a un punto en el que se da cuenta de que no tendrá todas las respuestas en este lado del cielo. Las personas emocional y espiritualmente sanas pueden trabajar a través del cómo y el por qué y seguir adelante, están contentas en esperar las respuestas en el cielo, mientras que un tallo magullado no puede - piensa mucho sobre el cómo y el por qué.
Jesús no le ofreció a esta mujer la explicación, ni ofrecerá a otras personas tampoco la explicación en los ejemplos siguientes en los evangelios - algunas cosas deben esperar hasta que lleguen al cielo para ser contestadas. Para ser emocionalmente sana, una persona debe estar dispuesta a dejar a un lado las preguntas incontestables en un paso de fe y confianza.
Pablo dice en II Timoteo 1:12 (NVI): “...porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que tiene poder para guardar hasta aquel día lo que le he confiado". Confíe en Él con esas preguntas.
En el momento decisivo y especial de ella con Jesús, Él se había movido de su pasado y se centró en el aquí y ahora - la conversación actual. Él no le permitió a ella hablar de su pasado, ni hacer preguntas al respecto, ni mirar sobre su hombro una vez más, sollozando con preguntas para Dios encarnado quien estaba de pie delante de ella – Él estaba en el presente.
Me recuerda a algo que Él me dijo una vez en un juego de palabras en inglés: "Yo Soy, quien está siempre presente. Entonces, para estar en mi presencia debes estar en el presente".
En el aquí y ahora, en Su presencia, no hay necesidad de una explicación del pasado. Jesús no abordó el porqué de haber pasado por 5 matrimonios, simplemente lo reconoció y la guio a reconocerlo también. Luego Él siguió adelante.
Tercer paso de la sanidad emocional...
Cuando le dijo que era el Mesías en Juan 4:26, ella “dejó su cántaro”, volvió a la ciudad que condujo a la invitación a Jesús que permaneciera allí 2 días. Ella les dijo a otros acerca de su revelación. Dios la aceptó como era, incluido lo que ella había pasado, y ella había cambiado su opinión acerca de su propia historia. Ahora les dijo a otros cómo ella había cambiado.
Esa admisión de su nueva comprensión de su propia historia es otro elemento vital que vemos usado por Jesús una y otra vez. Reconozca donde está, su condición actual, permita que Dios le revele su comprensión de su propio pasado lo cual reajusta su forma de pensar, y entonces dígale a los demás cómo ha seguido adelante basado en la revelación de Dios que ha recibido.
Cuarto paso a la sanidad emocional...
Porque tengo tantos ejemplos de Jesús sanando las emociones en los evangelios, no estoy gastando mucho tiempo en cada principio a favor de mostrarle una variedad de personas y cómo estos mismos elementos se aplicaron a ellos - pero finalmente, este último punto sobre la mujer en el pozo.
Juan 4: 41-43 nos dice que Jesús se alojó 2 días con ellos, y luego se fue. Dejó a la mujer en el pozo con una nueva vida y una decisión que tomar. Esto es un método importante del Señor – la dejó con una decisión tal como nos hace hoy: específicamente, ¿qué va a hacer ella con este hombre #6 ahora con quien está viviendo?
No sabemos el trauma emocional que sufrió en sus primeros 5 matrimonios, pero sí, sabemos que había una razón por la cual estaba simplemente viviendo con hombre #6. En términos modernos, dado que las personas son lo mismo hoy como entonces, puede que hubiera sido miedo de alguna forma u otra - no queriendo enterrar a otro marido, no queriendo comprometerse para que él la deje por otra más joven - o por muchas otras razones, igual que hoy.
Jesús la dejó para que ella pudiera decidir
Hay muchos ejemplos que demuestran que el Señor suele desempeñar el papel de observador, sólo observando a ver lo que haremos. Si usted es como yo, ha estado muchas veces en medio de la toma de decisiones en las que ha estado consciente de que el Señor está mirando, esperando, permaneciendo en el fondo para ver qué decisión tomará.
" Cuando el Señor vio que Lea no era amada, le concedió hijos” (Genesis 29:31 NTI).
"No te alegres cuando tus enemigos caigan; no te pongas contento cuando tropiecen. Pues el Señor se molestará contigo..." (Proverbios 24:17-18 NTV).
“’¡Hombre, no sé de qué estás hablando’! —replicó Pedro. En el mismo momento en que dijo eso, cantó el gallo. El Señor se volvió y miró directamente a Pedro…” (Lucas 22:60-61 NVI).
Y así fue que Jesús dejó a la mujer en el pozo con una decisión para enfrentar: ¿Qué hará ella acerca de su estilo de vida? Siendo Dios, Él miraba desde lejos. Me gusta decirlo de esta manera: "Muchas veces Dios no está en el evento; Él se encuentra en nuestra respuesta a un evento". Le permitirá tomar una decisión completamente sin Su influencia - usted sabe lo suficiente para tomar una decisión piadosa - y Él pude ser encontrado en la decisión correcta.
Queriendo que Dios tome la decisión por ellos
Veo este evangelio de “Deje que Dios decida por mí”, repetidamente: los cristianos que no se mueven por la razón que suena espiritual de, “No quiero perder a Dios”, pero en realidad la razón es, “Tengo miedo”. "Tengo miedo al cambio". "Tengo miedo de la dificultad financiera y emocional". "Tengo miedo porque es todo nuevo para mí y lo que tengo y donde estoy, aunque miserables, ofrecen cierto grado de comodidad ya que son familiares". Jesús dejó a esta mujer para tomar sus propias decisiones acerca de su arreglo de vivienda. La persona emocionalmente magullada simplemente se siente sola, sin darse cuenta de que está sola únicamente en el sentido de que Dios está dando un paso hacia atrás porque la decisión presente es suya. Él ESTÁ allí, está sólo en el fondo fuera de la vista.
Y se me acabó el espacio – lamento cortarlo aquí – empezaremos aquí la próxima semana con otro ejemplo de la sanidad emocional en los evangelios....
Hasta luego, bendiciones,
John Fenn
www.cwowi.org y envíeme email a [email protected]
Como Jesús sana las emociones #3
Hola a todos,
En las dos primeras partes de esta serie, he señalado que Jesús primero y siempre reconoce dónde está una persona en ese momento, sin opinión ni juicio.
Con la mujer en el pozo, era muy claro:
“Es cierto que has tenido cinco, y el que ahora tienes no es tu esposo. En esto has dicho la verdad" (Juan 4:18 NTI).
Veremos este patrón una y otra vez en los evangelios como Jesús sana las emociones, el primer paso; reconozca dónde está ahora.
Tal vez no tan irónicamente, esto es también fundamental en cada programa no espiritual que ayuda con problemas emocionales, desde las adicciones hasta la depresión, desde la ruina financiera hasta las relaciones quebrantadas que las personas han traído sobre sí mismas. Todos estos programas y métodos no espirituales, sin darse cuenta, han estado siguiendo el camino en el que el Señor comienza el proceso de sanidad de las emociones: reconozca donde está ahora.
En palabras modernas diríamos 'responsabilícese' de su vida. Admita en donde está (en qué estado está) ahora, - sin ningún juicio - sólo reconózcalo. Esto es muy diferente al evangelio erróneo que exige poco para que todos se sientan bien, que no confronta el pecado, ni pide una decisión difícil ni firme que está presentado por las iglesias carismáticas que antes fueron de vanguardia (hasta las iglesias Word of Faith). Una gran parte del evangelio social es sólo invítele a Jesús en su vida y Él hará todo mejor. Pero los métodos de Jesús son muy claros: el primer paso es admitir dónde se encuentra. Sea responsable.
Segundo paso....
Permita que el Señor reajuste sus ideas acerca de su propia historia. Esta mujer había pasado por 5 matrimonios que produjeron un montón de recuerdos y emociones que formaron su opinión sobre sí misma y su vida. Cuando Jesús “me ha dicho todo lo que he hecho“, reajustó su comprensión de su propia historia. Tenía que tener en cuenta que Jesús estaba presente en todo y sabía de su pasado. Ella aún tenía que dejarse a sí misma a tener tales preguntas como, "Si tú sabías todo esto, y veías todo esto, y me miraste pasar por todo esto, ¿por qué no interviniste? ¿Dónde estabas"?
Segundo paso, parte A
Si tuvo preguntas así, Jesús no le ofreció ninguna explicación. Una persona que está emocionalmente herida debe llegar a un punto en el que se da cuenta de que no tendrá todas las respuestas en este lado del cielo. Las personas emocional y espiritualmente sanas pueden trabajar a través del cómo y el por qué y seguir adelante, están contentas en esperar las respuestas en el cielo, mientras que un tallo magullado no puede - piensa mucho sobre el cómo y el por qué.
Jesús no le ofreció a esta mujer la explicación, ni ofrecerá a otras personas tampoco la explicación en los ejemplos siguientes en los evangelios - algunas cosas deben esperar hasta que lleguen al cielo para ser contestadas. Para ser emocionalmente sana, una persona debe estar dispuesta a dejar a un lado las preguntas incontestables en un paso de fe y confianza.
Pablo dice en II Timoteo 1:12 (NVI): “...porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que tiene poder para guardar hasta aquel día lo que le he confiado". Confíe en Él con esas preguntas.
En el momento decisivo y especial de ella con Jesús, Él se había movido de su pasado y se centró en el aquí y ahora - la conversación actual. Él no le permitió a ella hablar de su pasado, ni hacer preguntas al respecto, ni mirar sobre su hombro una vez más, sollozando con preguntas para Dios encarnado quien estaba de pie delante de ella – Él estaba en el presente.
Me recuerda a algo que Él me dijo una vez en un juego de palabras en inglés: "Yo Soy, quien está siempre presente. Entonces, para estar en mi presencia debes estar en el presente".
En el aquí y ahora, en Su presencia, no hay necesidad de una explicación del pasado. Jesús no abordó el porqué de haber pasado por 5 matrimonios, simplemente lo reconoció y la guio a reconocerlo también. Luego Él siguió adelante.
Tercer paso de la sanidad emocional...
Cuando le dijo que era el Mesías en Juan 4:26, ella “dejó su cántaro”, volvió a la ciudad que condujo a la invitación a Jesús que permaneciera allí 2 días. Ella les dijo a otros acerca de su revelación. Dios la aceptó como era, incluido lo que ella había pasado, y ella había cambiado su opinión acerca de su propia historia. Ahora les dijo a otros cómo ella había cambiado.
Esa admisión de su nueva comprensión de su propia historia es otro elemento vital que vemos usado por Jesús una y otra vez. Reconozca donde está, su condición actual, permita que Dios le revele su comprensión de su propio pasado lo cual reajusta su forma de pensar, y entonces dígale a los demás cómo ha seguido adelante basado en la revelación de Dios que ha recibido.
Cuarto paso a la sanidad emocional...
Porque tengo tantos ejemplos de Jesús sanando las emociones en los evangelios, no estoy gastando mucho tiempo en cada principio a favor de mostrarle una variedad de personas y cómo estos mismos elementos se aplicaron a ellos - pero finalmente, este último punto sobre la mujer en el pozo.
Juan 4: 41-43 nos dice que Jesús se alojó 2 días con ellos, y luego se fue. Dejó a la mujer en el pozo con una nueva vida y una decisión que tomar. Esto es un método importante del Señor – la dejó con una decisión tal como nos hace hoy: específicamente, ¿qué va a hacer ella con este hombre #6 ahora con quien está viviendo?
No sabemos el trauma emocional que sufrió en sus primeros 5 matrimonios, pero sí, sabemos que había una razón por la cual estaba simplemente viviendo con hombre #6. En términos modernos, dado que las personas son lo mismo hoy como entonces, puede que hubiera sido miedo de alguna forma u otra - no queriendo enterrar a otro marido, no queriendo comprometerse para que él la deje por otra más joven - o por muchas otras razones, igual que hoy.
Jesús la dejó para que ella pudiera decidir
Hay muchos ejemplos que demuestran que el Señor suele desempeñar el papel de observador, sólo observando a ver lo que haremos. Si usted es como yo, ha estado muchas veces en medio de la toma de decisiones en las que ha estado consciente de que el Señor está mirando, esperando, permaneciendo en el fondo para ver qué decisión tomará.
" Cuando el Señor vio que Lea no era amada, le concedió hijos” (Genesis 29:31 NTI).
"No te alegres cuando tus enemigos caigan; no te pongas contento cuando tropiecen. Pues el Señor se molestará contigo..." (Proverbios 24:17-18 NTV).
“’¡Hombre, no sé de qué estás hablando’! —replicó Pedro. En el mismo momento en que dijo eso, cantó el gallo. El Señor se volvió y miró directamente a Pedro…” (Lucas 22:60-61 NVI).
Y así fue que Jesús dejó a la mujer en el pozo con una decisión para enfrentar: ¿Qué hará ella acerca de su estilo de vida? Siendo Dios, Él miraba desde lejos. Me gusta decirlo de esta manera: "Muchas veces Dios no está en el evento; Él se encuentra en nuestra respuesta a un evento". Le permitirá tomar una decisión completamente sin Su influencia - usted sabe lo suficiente para tomar una decisión piadosa - y Él pude ser encontrado en la decisión correcta.
Queriendo que Dios tome la decisión por ellos
Veo este evangelio de “Deje que Dios decida por mí”, repetidamente: los cristianos que no se mueven por la razón que suena espiritual de, “No quiero perder a Dios”, pero en realidad la razón es, “Tengo miedo”. "Tengo miedo al cambio". "Tengo miedo de la dificultad financiera y emocional". "Tengo miedo porque es todo nuevo para mí y lo que tengo y donde estoy, aunque miserables, ofrecen cierto grado de comodidad ya que son familiares". Jesús dejó a esta mujer para tomar sus propias decisiones acerca de su arreglo de vivienda. La persona emocionalmente magullada simplemente se siente sola, sin darse cuenta de que está sola únicamente en el sentido de que Dios está dando un paso hacia atrás porque la decisión presente es suya. Él ESTÁ allí, está sólo en el fondo fuera de la vista.
Y se me acabó el espacio – lamento cortarlo aquí – empezaremos aquí la próxima semana con otro ejemplo de la sanidad emocional en los evangelios....
Hasta luego, bendiciones,
John Fenn
www.cwowi.org y envíeme email a [email protected]