Understanding free will, 1 of 3
Entendiendo el libre albedrío, 1/3
Hola a todos,
"Si tus amigos saltaran de un acantilado, ¿saltarías tú también?"
No recuerdo lo que hice, pero sí recuerdo la punzante pregunta de mamá. Ella estaba tratando de hacerme comprender que yo era responsable de mis acciones. Me estaba diciendo que mi libre albedrío combinado con el sentido común y la rectitud eran más importantes que lo que mis amigos estaban haciendo.
Los ángeles y los humanos son seres espirituales creados con libre albedrío
Parece que, según las escrituras, los seres espirituales son eternos, tienen la capacidad de hablar espontáneamente enraizada en su espíritu y tienen libre albedrío.
Esto tiene sentido, ya que Hebreos 12:9, Zacarías 12:1, Isaías 42:5, Salmo 104:30, Job 33:4 y Deuteronomio 32:18 afirman que Dios Padre nos crea por Su Espíritu. Por lo tanto, somos eternos como nuestro Padre, desarrollamos pensamientos expresados en palabras como nuestro Padre, y tenemos libre albedrío. Todos somos creados "vivos para Dios" como lo fueron Adán y Eva, desnudos e inocentes, teniendo que ejercer el libre albedrío sobre si querían seguir la vida o pecar.
(Esto explica por qué la Biblia no dice nada acerca de simplemente terminar con la existencia de Satanás o de un incrédulo. Somos seres espirituales, un espíritu no puede simplemente "terminarse", hasta donde se nos ha dicho, porque fuimos creados del Padre eterno.)
Por lo tanto, somos seres soberanos. Durante una visita en la que el Señor me estaba enseñando acerca de los ángeles y los demonios, Él preguntó: "Cuando ves un demonio, ¿qué aspecto tiene?" Mientras describía a los demonios que había visto, grandes y pequeños, cómo parecían ser una sombra bastante arrugada de algún yo anterior, el rasgo común que dije fue; "Siempre están desnudos".
Él dijo: "Muy bien. ¿Y cuando ves ángeles, qué aspecto tienen?" Describí sus diferentes alturas, colores de piel, cabello, túnicas y estilos de esas túnicas, y demás, pero el rasgo común era; 'Están vestidos con túnicas'.
Dijo: "Cuando Lucifer se rebeló, él y los ángeles que lo siguieron fueron despojados de su rectitud, sellando su decisión. Los ángeles que se quedaron (mantuvieron su original) y se les dio vestiduras de justicia, siendo sellados en Mí por su decisión. De la misma manera, las personas que me eligen son selladas por el Espíritu del Padre y se les dan vestiduras de justicia..." (II Corintios 1:22; Efesios 1:13, 4:30; Apoc 4:4, 7:9, 13-14, 19:7-8, 14)
Lo que el Padre me habló al respecto cuando era adolescente
Había estado leyendo Colosenses 1:12-13: "Dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de su pueblo santo en el reino de la luz. El cual nos ha librado de la autoridad de las tinieblas y nos ha trasladado (trasladado) al reino de su amado Hijo".
Él dijo: "Tu cuerpo te da autoridad en la tierra mientras vive. Pero cuando el cuerpo muere, tu espíritu y tu alma automáticamente se vuelven sujetos al reino del cual eres ciudadano." (Sí, sé que tengo mala gramática, pero yo era un niño y así era como hablaba, así que eso fue lo que Él dijo.)
Hay muchos testimonios de personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte, en medio del proceso de morir, en los últimos estertores de su cuerpo, siendo arrastrados hacia abajo, hacia la oscuridad y el terror, que recordaron a Jesús y lo llamaron. Cuando lo hicieron, su movimiento hacia abajo se detuvo de inmediato. A veces informan que una mano de luz o un ser de luz, o Jesús mismo, los jaló hacia arriba y hacia adentro de su cuerpo, ahora para vivir y contar su historia para que otros puedan elegir creer.
Tu cuerpo te da autoridad en la tierra. Pero tu ciudadanía está determinada por la "condición" de tu espíritu. O ha sido recreado por el Espíritu de Dios y ahora eres un ciudadano del reino de la luz, o eres de la oscuridad.
"Porque eras tinieblas, pero ahora eres luz. ¡Vivan como hijos de la luz!” Efesios 5:8
Si todo lo que sucediera fuera que sus pecados fueran perdonados, igualmente irían al infierno.
Eso se debe a que no es solo el perdón de los pecados lo que permite que una persona entre al cielo. Es la cruz Y la resurrección, lo que trae la recreación del espíritu.
Legalmente, ¿no ha perdonado el Padre los pecados de cada persona que ha vivido o vivirá? Sin embargo, ¿cuántos millones siguen rechazándolo y decidiendo ir al infierno? Los pecados son perdonados, pero eso no significa que todos vayan automáticamente al cielo.
No, cada uno de nosotros debe decidir, por su propia voluntad, creer en Jesús. ¿Qué hay en ese acto de libre voluntad que nos permite entrar al cielo? Es el hecho de que nuestro hombre espiritual es en ese momento recreado por el Espíritu Santo, lo que nos permite ser residentes de ese lugar puro y santo llamado cielo.
La cruz pagó por nuestros pecados; la resurrección proporcionó el poder para recrear a nuestro hombre espiritual.
Ambos son necesarios: "Porque morimos y fuimos sepultados con Cristo por el bautismo. Y como Cristo resucitó de los muertos por la gloria y el poder del Padre, ahora también nosotros andemos en una vida nueva." Romanos 6:4
"Para que sean abiertos los ojos de vuestro entendimiento, para que conozcáis... el gran poder de su (el Padre) para con nosotros los que creemos. Es ese mismo poder poderoso (que obra en ti) que ejerció cuando resucitó a Cristo de entre los muertos y lo sentó a su diestra..." Efesios 1:18-20
El poder que el Padre ejerció para resucitar a Jesús de entre los muertos, se puso en marcha en ese momento hace unos 2000 años, y nunca se ha detenido. Nunca ha perdido su poder, y es el mismo poder que obra en ti y en mí para conformarnos a la imagen de Su Hijo. Los ángeles dijeron: "Él HA resucitado". Esa es una condición eterna: HA resucitado. El poder que lo resucitó a esa condición de eterno "resucitado" es el poder que obra en nuestro hombre espiritual hasta el día de hoy.
Deja que eso penetre en ti. El poder que resucitó a Jesús de entre los muertos es exactamente el mismo poder que obra en tu espíritu ahora mismo. Todo lo que tenemos en Cristo. Cada experiencia que has tenido en Él, cada vez que has sentido Su presencia, todo lo que dijo Pablo es el mismo poder poderoso del Padre que ejerció cuando resucitó a Jesús de entre los muertos hace unos 2000 años. Hace años, ¡ese mismo poder está en nosotros!
La semana que viene retomaremos el tema, especialmente sobre nuestra voluntad soberana y la lucha por nuestro libre albedrío y el aprendizaje sobre él. ¿Qué hacemos con todo ese poder en nuestro espíritu?
Eres un ser soberano. Eres eterno. El poder que obra en ti es exactamente el mismo poder que se desató el día de la resurrección y continuará hasta tu propio día de resurrección, ¡y más allá! Tu espíritu ha sido recreado por el Espíritu de Dios. Eso te convierte en un ciudadano del cielo, y ningún hombre ni demonio tiene la autoridad o el poder para cambiar eso.
Hasta la semana que viene, bendiciones,
John Fenn/DP
http://www.cwowi.org
Envíame un correo electrónico a [email protected] o [email protected]
Entendiendo el libre albedrío, 1/3
Hola a todos,
"Si tus amigos saltaran de un acantilado, ¿saltarías tú también?"
No recuerdo lo que hice, pero sí recuerdo la punzante pregunta de mamá. Ella estaba tratando de hacerme comprender que yo era responsable de mis acciones. Me estaba diciendo que mi libre albedrío combinado con el sentido común y la rectitud eran más importantes que lo que mis amigos estaban haciendo.
Los ángeles y los humanos son seres espirituales creados con libre albedrío
Parece que, según las escrituras, los seres espirituales son eternos, tienen la capacidad de hablar espontáneamente enraizada en su espíritu y tienen libre albedrío.
Esto tiene sentido, ya que Hebreos 12:9, Zacarías 12:1, Isaías 42:5, Salmo 104:30, Job 33:4 y Deuteronomio 32:18 afirman que Dios Padre nos crea por Su Espíritu. Por lo tanto, somos eternos como nuestro Padre, desarrollamos pensamientos expresados en palabras como nuestro Padre, y tenemos libre albedrío. Todos somos creados "vivos para Dios" como lo fueron Adán y Eva, desnudos e inocentes, teniendo que ejercer el libre albedrío sobre si querían seguir la vida o pecar.
(Esto explica por qué la Biblia no dice nada acerca de simplemente terminar con la existencia de Satanás o de un incrédulo. Somos seres espirituales, un espíritu no puede simplemente "terminarse", hasta donde se nos ha dicho, porque fuimos creados del Padre eterno.)
Por lo tanto, somos seres soberanos. Durante una visita en la que el Señor me estaba enseñando acerca de los ángeles y los demonios, Él preguntó: "Cuando ves un demonio, ¿qué aspecto tiene?" Mientras describía a los demonios que había visto, grandes y pequeños, cómo parecían ser una sombra bastante arrugada de algún yo anterior, el rasgo común que dije fue; "Siempre están desnudos".
Él dijo: "Muy bien. ¿Y cuando ves ángeles, qué aspecto tienen?" Describí sus diferentes alturas, colores de piel, cabello, túnicas y estilos de esas túnicas, y demás, pero el rasgo común era; 'Están vestidos con túnicas'.
Dijo: "Cuando Lucifer se rebeló, él y los ángeles que lo siguieron fueron despojados de su rectitud, sellando su decisión. Los ángeles que se quedaron (mantuvieron su original) y se les dio vestiduras de justicia, siendo sellados en Mí por su decisión. De la misma manera, las personas que me eligen son selladas por el Espíritu del Padre y se les dan vestiduras de justicia..." (II Corintios 1:22; Efesios 1:13, 4:30; Apoc 4:4, 7:9, 13-14, 19:7-8, 14)
Lo que el Padre me habló al respecto cuando era adolescente
Había estado leyendo Colosenses 1:12-13: "Dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de su pueblo santo en el reino de la luz. El cual nos ha librado de la autoridad de las tinieblas y nos ha trasladado (trasladado) al reino de su amado Hijo".
Él dijo: "Tu cuerpo te da autoridad en la tierra mientras vive. Pero cuando el cuerpo muere, tu espíritu y tu alma automáticamente se vuelven sujetos al reino del cual eres ciudadano." (Sí, sé que tengo mala gramática, pero yo era un niño y así era como hablaba, así que eso fue lo que Él dijo.)
Hay muchos testimonios de personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte, en medio del proceso de morir, en los últimos estertores de su cuerpo, siendo arrastrados hacia abajo, hacia la oscuridad y el terror, que recordaron a Jesús y lo llamaron. Cuando lo hicieron, su movimiento hacia abajo se detuvo de inmediato. A veces informan que una mano de luz o un ser de luz, o Jesús mismo, los jaló hacia arriba y hacia adentro de su cuerpo, ahora para vivir y contar su historia para que otros puedan elegir creer.
Tu cuerpo te da autoridad en la tierra. Pero tu ciudadanía está determinada por la "condición" de tu espíritu. O ha sido recreado por el Espíritu de Dios y ahora eres un ciudadano del reino de la luz, o eres de la oscuridad.
"Porque eras tinieblas, pero ahora eres luz. ¡Vivan como hijos de la luz!” Efesios 5:8
Si todo lo que sucediera fuera que sus pecados fueran perdonados, igualmente irían al infierno.
Eso se debe a que no es solo el perdón de los pecados lo que permite que una persona entre al cielo. Es la cruz Y la resurrección, lo que trae la recreación del espíritu.
Legalmente, ¿no ha perdonado el Padre los pecados de cada persona que ha vivido o vivirá? Sin embargo, ¿cuántos millones siguen rechazándolo y decidiendo ir al infierno? Los pecados son perdonados, pero eso no significa que todos vayan automáticamente al cielo.
No, cada uno de nosotros debe decidir, por su propia voluntad, creer en Jesús. ¿Qué hay en ese acto de libre voluntad que nos permite entrar al cielo? Es el hecho de que nuestro hombre espiritual es en ese momento recreado por el Espíritu Santo, lo que nos permite ser residentes de ese lugar puro y santo llamado cielo.
La cruz pagó por nuestros pecados; la resurrección proporcionó el poder para recrear a nuestro hombre espiritual.
Ambos son necesarios: "Porque morimos y fuimos sepultados con Cristo por el bautismo. Y como Cristo resucitó de los muertos por la gloria y el poder del Padre, ahora también nosotros andemos en una vida nueva." Romanos 6:4
"Para que sean abiertos los ojos de vuestro entendimiento, para que conozcáis... el gran poder de su (el Padre) para con nosotros los que creemos. Es ese mismo poder poderoso (que obra en ti) que ejerció cuando resucitó a Cristo de entre los muertos y lo sentó a su diestra..." Efesios 1:18-20
El poder que el Padre ejerció para resucitar a Jesús de entre los muertos, se puso en marcha en ese momento hace unos 2000 años, y nunca se ha detenido. Nunca ha perdido su poder, y es el mismo poder que obra en ti y en mí para conformarnos a la imagen de Su Hijo. Los ángeles dijeron: "Él HA resucitado". Esa es una condición eterna: HA resucitado. El poder que lo resucitó a esa condición de eterno "resucitado" es el poder que obra en nuestro hombre espiritual hasta el día de hoy.
Deja que eso penetre en ti. El poder que resucitó a Jesús de entre los muertos es exactamente el mismo poder que obra en tu espíritu ahora mismo. Todo lo que tenemos en Cristo. Cada experiencia que has tenido en Él, cada vez que has sentido Su presencia, todo lo que dijo Pablo es el mismo poder poderoso del Padre que ejerció cuando resucitó a Jesús de entre los muertos hace unos 2000 años. Hace años, ¡ese mismo poder está en nosotros!
La semana que viene retomaremos el tema, especialmente sobre nuestra voluntad soberana y la lucha por nuestro libre albedrío y el aprendizaje sobre él. ¿Qué hacemos con todo ese poder en nuestro espíritu?
Eres un ser soberano. Eres eterno. El poder que obra en ti es exactamente el mismo poder que se desató el día de la resurrección y continuará hasta tu propio día de resurrección, ¡y más allá! Tu espíritu ha sido recreado por el Espíritu de Dios. Eso te convierte en un ciudadano del cielo, y ningún hombre ni demonio tiene la autoridad o el poder para cambiar eso.
Hasta la semana que viene, bendiciones,
John Fenn/DP
http://www.cwowi.org
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