How Faith, Common Sense and Logic Work Together #2 of 3
Cómo la Fe, el Sentido Común y la Lógica Trabajan Juntos #2 de 3
Hola a todos,
La semana pasada fui bastante directo con la corriente del cristianismo que piensa que la fe está separada de la voluntad del Padre. La fe no llama a algo que es, como si no fuera. Por la fe entendemos... Debemos entender, es decir, adquirimos conocimiento de la circunstancia, y lo entendemos por la fe. Pero nuevamente, la fe es nuestra respuesta a una revelación. La fe es nuestra respuesta a la gracia y dirección de Dios.
Noé tuvo una revelación sobre el diluvio y las instrucciones para construir un barco. Eso es gracia. La fe fue entender lo que la gracia significaba para él, su familia y su mundo. Por la fe (nuestra respuesta a una revelación) entendemos.
Cuando Chris necesitaba terapia física, ocupacional y del habla
Nuestro hijo mayor, Chris, nació por cesárea de emergencia con el cordón umbilical enrollado alrededor de su cuello en lo que el médico describió como un nudo corredizo. Con cada contracción se cortaba el oxígeno, dejándolo con daño cerebral. La lesión en el cerebro durante el parto o nacimiento se llama "parálisis cerebral" o "PC". La parálisis cerebral es una lesión, no una enfermedad ni un demonio. Es como una lesión en cualquier otra parte del cuerpo, excepto que en el cerebro, una lesión de este tipo afecta a todo.
En el caso de Chris y combinado con un derrame cerebral a los 17 años, lo dejó sin el uso de su mano izquierda, débil en el abdomen y en una silla de ruedas. Puede sostener su peso brevemente, pero no puede caminar. Además, mentalmente tiene alrededor de 4 o 5 años y es el niño más extrovertido, amador de Jesús, con corazón tierno que jamás hayas esperado conocer en un cuerpo de un hombre adulto (nació en 1979). Su fe sencilla nos mantiene humildes y enfocados en la esencia de nuestro caminar con el Señor y el Padre.
Cuando tenía unos 5 años, en 1984
Los médicos recomendaron terapias físicas, ocupacionales y del habla. Estábamos en conflicto, ya que éramos creyentes confundidos de la Palabra de Fe (Word of Faith) y padres primerizos. No sabíamos si las terapias estaban "en contra de nuestra fe". A principios de los años 80s, cuando Palabra de Fe se afianzó, algunas personas incluso se preguntaban si era contrario a su fe tener un seguro de automóvil, de salud, de vida y de hogar. ¿El seguro era contrario a la fe? Era una gran pregunta en ese entonces. Necesitábamos una palabra del Señor para poder tener fe, lo que nos permitiría entender lo que nos estaba sucediendo. Por la fe entendemos. Necesitábamos una palabra de parte del Señor.
Estas preguntas difíciles sobre qué hacer en lo natural (terapias) nos obligaron a considerar la posibilidad de que Chris fuera así el resto de su vida. Nos obligaron a considerar que tal vez necesitara cuidados especiales por el resto de su vida. Siempre habíamos pensado que la fe algún día lo sanaría y, honestamente, ignoramos ideas de que necesitara terapias, educación especial, aparatos como andadores, sillas de ruedas y cosas así. No era que estuviéramos en negación, sino más bien como si estuviéramos concentrados en lo que nos habían enseñado sobre reclamar y hablar de la "fe". Que nos pidieran que consideráramos ayudas prácticas y naturales para él fue como una bofetada en la cara.
Nunca habíamos pensado en que Chris continuara su vida con parálisis cerebral y todas las discapacidades que eso significaba para él y lo que significaba para nuestras vidas. El médico le dijo a Barb al momento del diagnóstico: "Pónganlo en una casa hogar y olvídense de que alguna vez lo tuvieron. No hay ninguna indicación de que sus siguientes hijos sean como él. Pónganlo en una casa hogar , olvídense de que lo tuvieron y sigan con sus vidas". Barb me llamó al trabajo llorando de angustia por la crueldad de las palabras del médico y por el diagnóstico de parálisis cerebral. Eran decisiones difíciles que Dios nos pedía que afrontáramos.
Ninguna imposición de manos, ningún decreto, ninguna declaración, ningún ayuno, ningún grito en el nombre de Jesús cambiaron absolutamente nada; no tuvimos ninguna revelación del cielo, así que no teníamos fe para saber qué hacer; estábamos siguiendo los pasos de lo que nos habían enseñado. Pero no había Vida en nada de eso. No había presencia del Espíritu Santo cuando hablábamos, ordenábamos y decretábamos.
La gracia viene primero, luego la fe, y eso no es de nosotros. Nuestra salvación se basa en que hayamos recibido la revelación de que Jesús es el Señor, luego confesemos con nuestra boca y con nuestra vida, aquella respuesta a esa revelación es la fe. Teníamos 22 años, éramos padres primerizos y nos dijeron que dejáramos a nuestro hijo primogénito en una casa hogar y nos olvidáramos de él. Por supuesto que nos negamos. Pero a los 5 años de edad, la realidad de que nuestro hijo era discapacitado y necesitaba terapias exigía tomar decisiones. Busqué al Señor con mucha oración y no me iba a ir sin una respuesta hasta que me mostrara Su gracia para esta situación. Entonces podría tener fe para entender.
El Señor me habló cuando le pregunté acerca de poner a Chris en diversas terapias: “Las terapias trabajan conmigo, no contra mí.” (¿Por qué Señor?) "Porque hacen que los músculos se muevan como lo harían normalmente funcionando así de la forma en que el cuerpo fue diseñado junto con los procesos de sanación ya creados dentro del cuerpo. Las terapias funcionan con la sanación, no en contra de la sanación." Pusimos a Chris en las 3 terapias y le hicieron algún bien. Pero también mantuvimos cerca de nuestro corazón preguntas sobre nuestro futuro como familia. Mantenerlo en casa significaba que el "trabajo" de Barb sería el de ama de casa a tiempo completo, poniendo toda la presión sobre mí para tener una casa donde vivir. Decisiones difíciles para una pareja de recién casados.
La fe no utiliza principios piadosos establecidos en la Palabra independientemente del Padre y de Su voluntad para facilitar lo que creemos que debe suceder. No. Andamos con Él para descubrir Su voluntad, que siempre seguirá Sus caminos delineados en las Escrituras. Luego, con Él, pensamos y determinamos cómo Su voluntad revelada a nosotros se aplicará en la vida. Eso es lo que Noé, Abraham, Sara, Moisés, Josué y otros grandes hombres y mujeres de la fe hicieron y siguen haciendo.
Cuando Jesús tuvo ante sí el dilema de alimentar a 5.000 hombres, Él entendió el problema a través de la fe. Jesús afirmó en Juan 5:19 que solo hicía lo que veía al Padre hacer. Así que hizo que las 5.000 personas se sienten en grupos organizados de 50s y de 100s, respondiendo al problema de la multitud organizándolas. LUEGO hizo el milagro.
Cuando Jesús tuvo ante sí una boda en la que se estaba quedando sin vino, Él entendió el problema por la la fe. Preguntó qué recursos estaban disponibles y cuando se le dijo, respondió con instrucciones de llenar de agua las 6 tinajas de piedra. LUEGO hizo el milagro.
Es por la fe que entendemos. Eso significa que primeramente tenemos que obtener la gracia. ¿Mal diagnóstico? Estáte en silencio y busca a Dios, no te des por vencido hasta que tengas paz acerca de ir en esa o aquella dirección. Ya sea que se trate de un milagro que se te ha revelado que sucederá, o que uses medicamentos para combatir el diagnóstico, primeramente obtén Su Palabra al respecto, LUEGO declara la Palabra.
Más sobre este tema la próxima semana... hasta entonces, ¡bendiciones!
John Fenn
http://www.cwowi.org
Pueden escribirme por correo electrónico a [email protected] o [email protected]
Cómo la Fe, el Sentido Común y la Lógica Trabajan Juntos #2 de 3
Hola a todos,
La semana pasada fui bastante directo con la corriente del cristianismo que piensa que la fe está separada de la voluntad del Padre. La fe no llama a algo que es, como si no fuera. Por la fe entendemos... Debemos entender, es decir, adquirimos conocimiento de la circunstancia, y lo entendemos por la fe. Pero nuevamente, la fe es nuestra respuesta a una revelación. La fe es nuestra respuesta a la gracia y dirección de Dios.
Noé tuvo una revelación sobre el diluvio y las instrucciones para construir un barco. Eso es gracia. La fe fue entender lo que la gracia significaba para él, su familia y su mundo. Por la fe (nuestra respuesta a una revelación) entendemos.
Cuando Chris necesitaba terapia física, ocupacional y del habla
Nuestro hijo mayor, Chris, nació por cesárea de emergencia con el cordón umbilical enrollado alrededor de su cuello en lo que el médico describió como un nudo corredizo. Con cada contracción se cortaba el oxígeno, dejándolo con daño cerebral. La lesión en el cerebro durante el parto o nacimiento se llama "parálisis cerebral" o "PC". La parálisis cerebral es una lesión, no una enfermedad ni un demonio. Es como una lesión en cualquier otra parte del cuerpo, excepto que en el cerebro, una lesión de este tipo afecta a todo.
En el caso de Chris y combinado con un derrame cerebral a los 17 años, lo dejó sin el uso de su mano izquierda, débil en el abdomen y en una silla de ruedas. Puede sostener su peso brevemente, pero no puede caminar. Además, mentalmente tiene alrededor de 4 o 5 años y es el niño más extrovertido, amador de Jesús, con corazón tierno que jamás hayas esperado conocer en un cuerpo de un hombre adulto (nació en 1979). Su fe sencilla nos mantiene humildes y enfocados en la esencia de nuestro caminar con el Señor y el Padre.
Cuando tenía unos 5 años, en 1984
Los médicos recomendaron terapias físicas, ocupacionales y del habla. Estábamos en conflicto, ya que éramos creyentes confundidos de la Palabra de Fe (Word of Faith) y padres primerizos. No sabíamos si las terapias estaban "en contra de nuestra fe". A principios de los años 80s, cuando Palabra de Fe se afianzó, algunas personas incluso se preguntaban si era contrario a su fe tener un seguro de automóvil, de salud, de vida y de hogar. ¿El seguro era contrario a la fe? Era una gran pregunta en ese entonces. Necesitábamos una palabra del Señor para poder tener fe, lo que nos permitiría entender lo que nos estaba sucediendo. Por la fe entendemos. Necesitábamos una palabra de parte del Señor.
Estas preguntas difíciles sobre qué hacer en lo natural (terapias) nos obligaron a considerar la posibilidad de que Chris fuera así el resto de su vida. Nos obligaron a considerar que tal vez necesitara cuidados especiales por el resto de su vida. Siempre habíamos pensado que la fe algún día lo sanaría y, honestamente, ignoramos ideas de que necesitara terapias, educación especial, aparatos como andadores, sillas de ruedas y cosas así. No era que estuviéramos en negación, sino más bien como si estuviéramos concentrados en lo que nos habían enseñado sobre reclamar y hablar de la "fe". Que nos pidieran que consideráramos ayudas prácticas y naturales para él fue como una bofetada en la cara.
Nunca habíamos pensado en que Chris continuara su vida con parálisis cerebral y todas las discapacidades que eso significaba para él y lo que significaba para nuestras vidas. El médico le dijo a Barb al momento del diagnóstico: "Pónganlo en una casa hogar y olvídense de que alguna vez lo tuvieron. No hay ninguna indicación de que sus siguientes hijos sean como él. Pónganlo en una casa hogar , olvídense de que lo tuvieron y sigan con sus vidas". Barb me llamó al trabajo llorando de angustia por la crueldad de las palabras del médico y por el diagnóstico de parálisis cerebral. Eran decisiones difíciles que Dios nos pedía que afrontáramos.
Ninguna imposición de manos, ningún decreto, ninguna declaración, ningún ayuno, ningún grito en el nombre de Jesús cambiaron absolutamente nada; no tuvimos ninguna revelación del cielo, así que no teníamos fe para saber qué hacer; estábamos siguiendo los pasos de lo que nos habían enseñado. Pero no había Vida en nada de eso. No había presencia del Espíritu Santo cuando hablábamos, ordenábamos y decretábamos.
La gracia viene primero, luego la fe, y eso no es de nosotros. Nuestra salvación se basa en que hayamos recibido la revelación de que Jesús es el Señor, luego confesemos con nuestra boca y con nuestra vida, aquella respuesta a esa revelación es la fe. Teníamos 22 años, éramos padres primerizos y nos dijeron que dejáramos a nuestro hijo primogénito en una casa hogar y nos olvidáramos de él. Por supuesto que nos negamos. Pero a los 5 años de edad, la realidad de que nuestro hijo era discapacitado y necesitaba terapias exigía tomar decisiones. Busqué al Señor con mucha oración y no me iba a ir sin una respuesta hasta que me mostrara Su gracia para esta situación. Entonces podría tener fe para entender.
El Señor me habló cuando le pregunté acerca de poner a Chris en diversas terapias: “Las terapias trabajan conmigo, no contra mí.” (¿Por qué Señor?) "Porque hacen que los músculos se muevan como lo harían normalmente funcionando así de la forma en que el cuerpo fue diseñado junto con los procesos de sanación ya creados dentro del cuerpo. Las terapias funcionan con la sanación, no en contra de la sanación." Pusimos a Chris en las 3 terapias y le hicieron algún bien. Pero también mantuvimos cerca de nuestro corazón preguntas sobre nuestro futuro como familia. Mantenerlo en casa significaba que el "trabajo" de Barb sería el de ama de casa a tiempo completo, poniendo toda la presión sobre mí para tener una casa donde vivir. Decisiones difíciles para una pareja de recién casados.
La fe no utiliza principios piadosos establecidos en la Palabra independientemente del Padre y de Su voluntad para facilitar lo que creemos que debe suceder. No. Andamos con Él para descubrir Su voluntad, que siempre seguirá Sus caminos delineados en las Escrituras. Luego, con Él, pensamos y determinamos cómo Su voluntad revelada a nosotros se aplicará en la vida. Eso es lo que Noé, Abraham, Sara, Moisés, Josué y otros grandes hombres y mujeres de la fe hicieron y siguen haciendo.
Cuando Jesús tuvo ante sí el dilema de alimentar a 5.000 hombres, Él entendió el problema a través de la fe. Jesús afirmó en Juan 5:19 que solo hicía lo que veía al Padre hacer. Así que hizo que las 5.000 personas se sienten en grupos organizados de 50s y de 100s, respondiendo al problema de la multitud organizándolas. LUEGO hizo el milagro.
Cuando Jesús tuvo ante sí una boda en la que se estaba quedando sin vino, Él entendió el problema por la la fe. Preguntó qué recursos estaban disponibles y cuando se le dijo, respondió con instrucciones de llenar de agua las 6 tinajas de piedra. LUEGO hizo el milagro.
Es por la fe que entendemos. Eso significa que primeramente tenemos que obtener la gracia. ¿Mal diagnóstico? Estáte en silencio y busca a Dios, no te des por vencido hasta que tengas paz acerca de ir en esa o aquella dirección. Ya sea que se trate de un milagro que se te ha revelado que sucederá, o que uses medicamentos para combatir el diagnóstico, primeramente obtén Su Palabra al respecto, LUEGO declara la Palabra.
Más sobre este tema la próxima semana... hasta entonces, ¡bendiciones!
John Fenn
http://www.cwowi.org
Pueden escribirme por correo electrónico a [email protected] o [email protected]